viernes, 27 de noviembre de 2009

De lo poco que he aprendido...


Hoy voy a tratar de escribir como jamás lo he hecho antes…
He aprendido mucho en los últimos tiempos… siempre creí que para que alguien se suba a nuestros hombros, uno tiene que agacharse un poco…
Me genere muchísimas expectativas, cosa que no creo este mal el tenerlas…pero si hay que tener mucho cuidado en como se las dimensiona… porque podemos caer en la trampa de la que después es muy difícil salir… si después la realidad no coincide con ellas…trampa en la que yo misma sabiéndola, caí…
He aprendido que el camino de la paz es la aceptación de las cosas tal cual son…aunque nos revelemos a esta… no creo para nada en el esfuerzo como camino, para hacer algo… no creo haya que esforzarse sino que hay que dedicarse, que no es lo mismo…
La dedicación a algo, es apostar todo lo que soy a ello, no un esfuerzo…
No creo en el esfuerzo, en el sentido de forzarme a hacer lo que no quiero ni estoy dispuesta a hacer…
Si creo en la elección de caminos…
El esfuerzo dura lo que dura la fuerza de voluntad…
La dedicación… toda la vida…
Uno tiene que poder ser… para poder hacer…
Necesito encontrar nuevamente mi equilibrio; mi felicidad y la felicidad tiene que ver con tener paz, conmigo misma… algo que perdí hace long time… con la serenidad interior, con la tranquilidad de espíritu, que nada tiene que ver con lo que sucede alrededor…
La tristeza forma parte de mi camino, siempre ha sido así… como tal apenas sobrevivo…
Nos llegan muchos mensajes a lo largo de nuestra vida… pero únicamente les vemos cuando estamos pre-parados para ello…
La vida es un duro maestro que nos enseña todo el tiempo…
Uno hace lo que cree mejor en cada momento….
Saber cuando dejar que las cosas fluyan sin forzarlas es mi gran aprendizaje…y hubiera sido realmente sabio de mi parte, haberlo hecho…
Si alguna vez te lastime, amándote, voy a responsabilizarme por ello… pero no voy a acusarme por haberlo hecho…
La aceptación no significa cambiar mis incapacidades ni las tuyas… significa aceptarlas…
Se lo que valgo y vales, con nuestros defectos y virtudes y permitirnos cambiar estos cuando sea tiempo de hacerlo…
Quise que me oyeras sin juzgarme… que opinaras sin aconsejarme… que confiaras sin exigirme… que me ayudaras sin intentar decidir por mí… que me cuidaras sin anularme… que me miraras sin proyectar tus cosas en mi… que me abrasaras sin asfixiarme… que me animaras sin empujarme… que me sostuvieras sin hacerte cargo de mi… que me protegieras sin mentiras… que te acercaras sin invadirme… que conocieras las cosas mías que más te disgusten… que las aceptaras y no pretendieras cambiarlas… que supieras que contabas conmigo y aún cuentas… sin condiciones…
Obtuve eso y más de ti Agathus… lo mismo que di… por eso tal vez la vida irremediablemente nos separa… una vez más…

Jamás compartí nada de las palabras del Agathus que conocí… hoy me inclino a hacerlo… como homenaje a este amor… que cierto o no ha sido grande en si mismo…

Te amo Agathus como siempre te he amado y amare… in-condicionalmente...
 La Dama Basileia…



    Escrito por  Agathus….

Nos amábamos antes que fuera el mundo
Quien quiera que seas tú
Dos espíritus en el vacío profundo
Fundidos en un haz de luz

Dividididos por un instante
Por designios del supremo ser
Destinados a encontrarse
Yo como hombre, tú como mujer

No se de tu voz el acento
Ni he visto el color de tu piel
Pero que de Dios guardas fragmento
Con total certeza lo se

No se cuando, ni se donde
Tus ojos reflejaran los míos
Pero se que desde entonces
Seremos dos sobre un mismo camino

Tu serás mi fuerza
Yo seré tu guía
Tu, entusiasmo y alegría
Yo, la pausa y la paciencia

Tú, el amor y sentimiento
La pasión y la ternura
Yo, razón, conocimiento
Y un poquito de cordura

Y así juntos caminando
El retorno a nuestro hogar
Y en el, un padre esperando
Hacer una fiesta al llegar

Te amaba antes que el mundo fuera
Cuando el sol aun no daba su luz
Y te amare después que perezca
Quien quiera que seas tú


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